El inútil fraude cibernético
- Hugo Rodas
- 5 oct 2022
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 22 oct 2022
Visítenos en nuestra segunda vida virtual: www.lafundaciondemarcelo.org
Nuestra institución tuvo un primer percance que contribuyó a su reestructuración —¿no es este el significado, en castellano, de perestroika?— y ello se refleja en la composición del equipo de trabajo (véase "Nosotros", encabezado de la página web).
El fraude informático que nos afectara el pasado mes de septiembre, cometido por la ahora fantasma upempresa, a quien contratamos el hosting para la una página web por dos años, nos ha enseñado en la práctica la noción de que el ciberespacio es una "alucinación consensuada", como desde la literatura del ciberpunk la llamara William Gibson, hace ya décadas atrás.
Nuestra denuncia a la policía informática en México consta en comunicación electrónica iniciada el 14 de septiembre pasado y se puede ver abajo como PDF, lo mostramos como explicación para quienes tuvieron la paciencia de seguir el primer esfuerzo de levantar esta página que, en adelante y de modo al menos provisionalmente por un año contratamos a de la empresa Wix, tiene la terminación org en vez de com, por lo que las y los invitamos nuevamente a visitar el trabajo de la Fundación en: www.lafundaciondemarcelo.org
Lo preveíamos pero ahora lo sabemos mejor: las alucinaciones no pueden abolir la realidad, ni siquiera si son consensuadas. Nuestro esfuerzo realista está dirigido a hacer primero virtualmente y luego materialmente posible la publicación de la Obra completa de Marcelo Quiroga Santa Cruz, para un mejor conocimiento de la historia boliviana por parte de las nuevas generaciones así como publicar nuestra propia y modesta labor a través del Boletín in/formativo de la Fundación y de los CUADERNOS ROJO Y BLANCO.
Como además de la comunicación interpersonal buscamos construir una esfera pública global crítica, de trabajadores de la cultura que acompañen la lucha de los pueblos y los individuos, excluidos frente al sistema complejo subordinante que llamamos "orden global capitalista", y como estamos seguros del valor de la obra intelectual y moral de quienes conforman el Consejo consultivo, que han explicitado individualmente su generosa confianza para participar de este proyecto, lo más probable es que (como postulara agudamente Samuel Beckett) fracasemos una y otra vez, y cada vez mejor al levantar esta página. Lo seguiremos intentando cuantas veces sea preciso porque es la página de la Fundación de Marcelo.
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